¡Somos un chiste! Un caradura que dio un golpe y huyó del país en un maletero es hoy la deseada llave para alcanzar el poder. Silenciosamente el PP ha rehabilitado el comodín negociador de JUNTS, lo que tiene regusto de amnistía, mientras se ponen de perfil y se hace el sueco con la catastrofe de Mazón, o defendiendo los mismos mantras agendistas que el PSOE en el Parlamento Europeo. La ética más cristalina, la ejemplaridad, la dignidad del Estado de Derecho, esas cosas que se leen tan fantásticas se quedan en nada con esta gente…
Este penoso espectáculo que sufrimos diariamente lo estamos normalizando. Nuestros abuelos hubieran reventado, nosotros reenviamos memes. Así marca el termómetro de la sensible salud democrática. Este antiguo “negocio” del bipartidismo lo defienden los de siempre, los que continuamente se reparten la cosecha, y consideran a la nación como su finca. Los que nos despistan para que no pensemos que los dos partidos que se han repartido el poder, durante el último medio siglo, no son la solución, sino el problema. La corrupción se expande con el enésimo parón ferroviario del año y los aeropuertos participan del creciente caos. La “frenética palmera” de Montero denuncia sabotajes y Tezanos dice que las grabaciones con las voces de Ábalos y Santos Cerdán son un burdo montaje. Menos mal que el pasado fin de semana llegó la regeneración socialista y el regreso del PP de los valores. A lo largo de esta semana, pudimos comprobar una vez más, que la prensa subvencionada ya tenía escritos anticipadamente los titulares.
Su Sanchidad es único. Es un ser irrepetible. Dispuesto a todo para conservar el poder, aunque su propio partido y la nación sufran un desastre sin paliativos. Aunque el “gran timonel” nos ha convencido de que él desconocía la traición del número 2, del 3, del 4 al final llegamos a la conclusión de que nos enfrentamos a una organización criminal con sicarios amenazando a la UCO, a jueces y a fiscales; con equipos adjudicando obras públicas y tarifando por ello; con una sección dedicada a enchufar a amigas y a familiares; otra dedicada a los hidrocarburos, otra a los contratos de vacunas y mascarillas. Un potente y diversificado constructo a la mayor gloria del dinero y el poder.
Y la guinda de este estrafalario y rentable entramado, es que dos delincuentes –Cerdán y Puigdemont– negociaran personalmente una ley de amnistía para comprar una legislatura. Esa ley está, desde hace unos días, totalmente deslegitimada. Y cada día me sorprende menos que el Sr. Pumpido fuera a terminar su carrera siendo tan solo otro engranaje de un sistema enfermo.
Este pasado fin de semana, en los asépticos resúmenes de ambos congresos, unos han hablado de luchar contra la corrupción, sin reírse, y otros del debate de las ideas, sin aportar alguna idea. En el aquelarre del PSOE el objetivo no fue recuperar parroquianos sino suministrar más analgésicos a un pueblo, nosotros, de natural tranquilo, al que ahora todo esto le pilla con las cholas camino de la playa. Ya no son neuronas, basta con la hemeroteca.
De lo que nadie duda, es de que para declaraciones inolvidables, siempre tenemos a la auténtica izquierda caviar. Todos estos, estando en el pesebre, siendo parte del gobierno estos días ensayan pose indignadísima. La OTAN, y sus “ligeras” desviaciones presupuestarias, son una coartada tan válida como la podredumbre parlamentaria para marcar perfil propio. Yolanda e Irene están iracundas con el aumento del gasto militar y la deshonestidad de los socialistas. Están tan enfadadas que seguirán apostando por su Sanchidad el tiempo que haga falta. La entrevista del otro día, con la Ministra de Trabajo que no sabía lo que le decía a Alsina, ha pasado a los anales de la historia.
El 21º congreso del PP fue una balsa de aceite. Un congreso de unidad, y ya saben que en las empresas que llamamos partidos cuando a un congreso lo llaman ‘de unidad’ quieren decir “sin disidencia”. Por supuesto, aunque sean estructuras muy lineales siempre tiene disidentes. Lo que sucede es que, como afirmó el mítico John Wayne a Henry Fonda, «si puedes verlos, no son apaches». Todo llega a su momento. Las ideas, en ambas empresas, en ambos partidos, son las mismas. Siempre la agenda 2030, con mayor o menor estilo y educación. Es una cuestión de formas.
Pero los de Génova también se echan en brazos de Puigdemont como remedio contra su Sanchidad. De nuevo la burguesía catalana más antiespañola, la del 3%, es el salvavidas en mitad del naufragio. Tradición muy pepera, por otra parte, desde el pacto del Majestic, cuando Aznar hipotecó el alma de la juventud al separatismo, aunque lo denominaran con la etiqueta de transferir las competencias de educación. Estos son especialistas en defraudar a sus electores. Una y otra vez. Hasta con mayoría absoluta se transformaron en albaceas de Zapatero…que ya es decir.
Lo más esperpéntico de este pasado fin de semana fue observar cómo los dos individuos que lideran la política patria juegan al “y tú más”, al tiempo que eluden cualquier responsabilidad por la herencia envenenada que generan. Un terrible legado que han gestionado entre ambas sectas. Nada se comentó de que vamos en caída libre. En el año 2000 el 70% de los menores de 35 años era propietario de una vivienda, hoy el 85% se ve obligado a vivir con sus padres. Nada se comentó que en los años 90 habían llegado a España un millón de inmigrantes, y que en la actualidad estamos cercanos a los nueve millones de extranjeros. Nada se comentó, sobre que seamos un país donde en la actualidad hay más perros que niños… Ninguno de nuestros iluminados líderes, se responsabiliza de haber hipotecado el futuro a una juventud que llegará a la jubilación a los 71 años y con una paupérrima pensión…si hay suerte.
Nadie rinde cuentas en el patético régimen de la Amnistía. Ahora nos venden la gran coalición, la gran solución, para eternizar en la poltrona a los que generan el problema, a los que son el problema.
Llegó el verano, no se preocupen, tenemos la gran coalición, de iure o de facto. Pueden irse de vacaciones porque todo queda atado y bien atado.
Luis Nantón Díaz
GRÁN COALICIÓN
Related posts
SIEMPRE APRENDIENDO

Ante todo gracias por tu visita.
Te presento un recopilatorio de los artículos que semanalmente se publican en el CANARIAS 7, y que con auténtica finalidad terapéutica, me permiten soltar algo de lastre y compartir. En cierta medida, de eso se trata al escribir, de un sano impulso por compartir.
La experiencia es fruto directo de las vivencias que has englobado en tu vida, y mientras más dinámico, proactivo y decidido sea tu carácter, mayor es el número de percances, fracasos, éxitos… Los que están siempre en un sofá, suelen equivocarse muy poco…
Y, posiblemente eso sea la experiencia, el superar, o al menos intentarlo, infinidad de inconvenientes y obstáculos, procurando aprender al máximo de cada una de esas vivencias, por eso escribo, y me repito lo de siempre aprendiendo, siempre.
Me encantan los libros, desvelar sus secretos, y sobre todo vivificarlos. Es un verdadero reto alquímico. En su día, la novela de William Goldman “La Princesa Prometida” me desveló una de las primeras señales que han guiado mi camino. La vida es tremendamente injusta, absolutamente tendente al caos, pero es una experiencia única y verdaderamente hermosa. En esa dicotomía puede encontrarse ese óctuple noble sendero que determina la frase de aquel viejo samurái: “No importa la victoria, sino la pureza de la acción”.
Como un moderno y modesto samurái me veo ahora, en este siglo XXI… siempre aprendiendo. Los hombres de empresa, los hombres que intentamos sacar adelante los proyectos de inversión, la creación de empleo, los crecimientos sostenibles, imprimimos cierto carácter guerrero a una cuestión que es mucho más que números. Si además, te obstinas en combinar el sentido común, con principios, voluntad de superación y responsabilidad, ya es un lujo.
Si también logramos inferir carácter, lealtad y sobre todo principios a la actividad económica, es que esa guerra merece la pena. Posiblemente sea un justo combate.
Ver más